domingo, 17 de octubre de 2021

La colmena humana

El ser humano es distinto de insectos tales como las abejas o las hormigas. Sin embargo, resulta llamativo que muchas "sociedades" humanas se parezcan más a una colmena o a un hormiguero que a una sociedad orientada por las leyes naturales que gobiernan nuestra naturaleza humana.

Se dice que una imagen vale por cien palabras. De ahí que la idea de una colmena sirva para definir lo que acontece en la Argentina en estos últimos años. Recordemos que una colmena tiene una abeja reina, varios zánganos que la fecundan y que no trabajan, y numerosas obreras que trabajan y producen miel y jalea real. "Una colmena es el lugar donde vive una colonia de abejas, que en el caso de la abeja melífera (Apis mellifera) puede tener entre 40.000 y 70.000 ejemplares. En ella habitan 3 castas; la mayoría de las abejas que viven en la colmena son obreras, hembras infértiles que fabrican la miel. Además hay unos 300 zánganos, machos fértiles cuya única función es reproductiva. El corazón de la colmena es la abeja reina, la única hembra fértil cuya sola función es poner huevos. Ella es la madre de todas las abejas de la colmena y es cuidada y alimentada por las obreras. Éstos son insectos eusociales, es decir, que las abejas que viven en la misma colmena forman la organización social más elevada" (De https://www.petdarling.com/colmena-de-abejas/).

La Argentina contemporánea puede describirse, sin demasiada exageración, como una colmena que tiene una reina y que se llama CFK; tiene una gran cantidad de zánganos (parásitos sociales mantenidos por el Estado, que no trabajan o bien cumplen horarios sin producir nada de valor); tiene, además, un limitado números de obreras (sector productivo en disminución que es explotado laboralmente por el Estado) para mantener el creciente número de zánganos.

En este país se hace todo lo que a la reina se le viene en ganas, advirtiéndose que poco o nada se interesa por el resto, ya que se empecina en aumentar el número de zánganos para vencer en futuras elecciones.

Si la economía de un país se parece a la economía de un hogar, puede decirse que la economía nacional se asemeja a un hogar que tiene muchas deudas, que trabaja poco y gana poco. Y para colmo de males, en lugar de retraer sus gastos, trata de gastar cada vez más dinero. Ello se debe a que la reina quiere seguir ocupando ese lugar y por ello busca seguir aumentando la población de zánganos aunque las obreras cada vez sean más pobres.

Gran parte de la colmena sabe muy bien que a ese paso nos aproximamos a otras colmenas similares, denominadas Cuba y Venezuela, pero, aún así, quiere correr el riesgo para no dejar de seguir los ideales y las ambiciones de su abeja reina.

1 comentario:

agente t dijo...

Suele pasar que entre los zánganos que tiene a su servicio la abeja reina se encuentran algunos que además de copular bien también tienen una portentosa labia que consigue engatusar a las obreras, de modo que a éstas se les hace llevadero el suplicio que se les está provocando.