jueves, 20 de junio de 2024

Visión palestina del conflicto con Israel

Así como existe un expansionista sector israelí y también otro sector moderado o conservador, en el bando palestino existe un sector terrorista y belicoso y también sectores moderados. A continuación se transcribe parte de una entrevista realizada en 1993 por Jorge Halperín al profesor Edward Said, un palestino moderado, residente en EEUU.

JH: ¿Qué es para usted el acuerdo entre Israel y los palestinos, un avance o un retroceso?

ES: En algún sentido es un avance, porque los israelíes reconocieron a la OLP [Organización para la Liberación de Palestina] como el representante del pueblo palestino. También se habla de un retiro parcial de los israelíes y algunas áreas de autonomía municipal limitada para los palestinos. Ya no serán masacrados ni deportados ni encarcelados en masa como antes. Estos son los aspectos positivos.
Los aspectos negativos son mucho más impresionantes y dramáticos. Más del cincuenta por ciento de los palestinos hoy viven fuera de Gaza y Cisjordania (Margen Occidental) y ellos no tienen derechos. En segundo lugar, los israelíes seguirán controlando la tierra, el agua, el aire, las costas, la seguridad, los asuntos externos, los asentamientos, Jerusalén. Y tienen soberanía. Todo fue pospuesto hasta las negociaciones finales que comenzarán, según dicen, en dos o tres años.

¿Piensa que los palestinos sólo conseguirán un subestado?

No. No será ni eso. Será, en mi opinión, un lugar donde los israelíes utilizarán a los palestinos, a la OLP, como su policía. Todos los trabajos que les resultan difíciles a los israelíes, como la atención de la salud o la educación, estarán a cargo de los palestinos.

¿Qué es lo que sucedió hasta hoy?

En los veintiséis años que llevan de ocupación militar, los israelíes implantaron más de doscientos asentamientos. Por otra parte, según algunos tomaron el cuarenta y cinco por ciento de la tierra, y según otros hasta el sesenta por ciento. Tomaron el ochenta por ciento del agua. Tienen un gran poder militar. De modo que la posición palestina se debilitó cada vez más en todos estos años. No sólo porque las circunstancias son difíciles para los palestinos, sino por la incompetencia de sus líderes, que cometieron muchos errores.

UN GOBIERNO DE OCUPACIÓN

¿Cuestiona la conducción de Yasser Arafat?

Desde luego. En el 82' entraron en una guerra estúpida con los israelíes. En ese momento Arafat y su gente, en lugar de decir "Perdimos, renunciaremos, dejemos que otros lideren porque fracasamos", continuaron. En el 82', los norteamericanos salvaron a Arafat. En el 93' lo salvaron los israelíes. Una de las características de ese acuerdo es salvarse a sí mismo. A Arafat sólo le quedaba una carta, y era reconocer a Israel y decir "Nos rendimos". Y firmó la rendición.
Pero el acuerdo tiene cosas peores aún. Los israelíes van a controlar el desarrollo económico. En Cisjordania y Gaza, supuestamente se va a recibir dinero del Banco Mundial y de la Comunidad Europea. Pero los israelíes tienen que aprobar, por el Comité Conjunto Para el Desarrollo, los planes de desarrollo. Lo que quieren en Cisjordania es un mercado para sus productos y mano de obra barata.
Ahora, los palestinos no tienen ninguna manera de recibir dinero. No existen instituciones, los israelíes destruyeron todo. Hay miles de leyes que sancionaron los israelíes desde 1967. Lo mismo que sucede en Bangladesh. El Banco Mundial les da cien millones de dólares y sólo pueden tomar diez. No hay manera de recibir el dinero ni de invertirlo. En mi opinión, Arafat y su gente son incapaces de crear esas instituciones.

¿Por qué?

Porque son incompetentes. No saben hacerlo, nunca lo hicieron.

Que nunca lo hayan hecho no es una razón.

¿Recuerda que el 6 de octubre pasado (1993) Rabin y Arafat se reunieron en El Cairo? La razón fue que desde el 13 de setiembre hasta el 6 de octubre, Arafat y su gente no hicieron nada. Según la declaración de principios, las nuevas negociaciones debieron comenzar el 13 de setiembre. Los palestinos ni siquiera nombraron las comisiones porque se peleaban entre sí. Entonces, Rabin los llamó y les dijo "Quiero verlos en El Cairo".
Después del encuentro, Rabin partió hacia China y dijo "Descubrimos que los palestinos no tienen capacidad para hacer nada. Nosotros tenemos que hacer lo que ellos no saben hacer". La ironía es que los palestinos son los más educados del Medio Oriente, los más capaces, los más pudientes. Yo no quiero trabajar con Arafat, porque eso sería colaborar con él. En mi opinión, lo que los israelíes quieren de la OLP es un gobierno de ocupación capaz de reprimir cualquier intento de autodeterminación.

¿Pero no está tratado el fin de la ocupación?

En la declaración que se firmó en Oslo no se menciona en absoluto el fin de la ocupación. Es más, los israelíes nunca admitieron que son una fuerza ocupadora. Siempre dijeron que estaban administrando, liberando. Esto no cambió y Arafat lo aceptó y le mintió a su pueblo diciéndole que todo era un gran logro.
No es un logro, es un instrumento de rendición. Y le dijo a la gente que nos vencieron, que perdimos. Yo no lo acepto, y, como cualquier palestino, quiero seguir adelante. Él dice que estamos cansados, pero los argelinos lucharon durante ciento treinta años hasta que se independizaron de Francia. Los irlandeses lucharon durante novecientos años para independizarse de Inglaterra y aún hoy siguen luchando. ¿Por qué Arafat decidió ahora que había llegado el final? Para mí, es inaceptable.

¿De modo que para usted estos anuncios no instalan un acuerdo?

No, porque ahora las cosas son peores. En otras palabras, nos hemos atado a un acuerdo que él firmó solo, en secreto. Sólo cinco personas estaban al tanto. Además, negoció en inglés y no habla inglés. Negoció una declaración de principios sin un asesoramiento legal. Los israelíes tienen equipos de abogados y muchos mapas. Nosotros ni siquiera tenemos los mapas.

¿Usted piensa que Arafat y su gente están preparados para actuar como un movimiento de liberación, pero no para gobernar un pueblo?

No, dejaron de ser un movimiento de liberación hace quince años y se convirtieron en un movimiento de independencia nacional. Ahora dejaron de ser un movimiento de independencia y pasaron a ser un movimiento municipal. Y ni siquiera son capaces de eso.

¿Cuál va a ser la situación del cincuenta por ciento de los palestinos que, según usted, no viven en los territorios ocupados y serían desposeídos por el acuerdo?

Como mi situación. Yo soy un refugiado desde 1948. Toda mi familia -mis tíos, mis abuelos, todos- fue echada en 1948, cuando se creó el Estado de Israel. El número de palestinos que viven afuera de la Palestina asciende hoy a tres millones, incluyendo 400.000 en el Líbano, 250.000 en Siria, 1.700.000 en Jordania, 200.000 en Estados Unidos, 300.000 en Europa. Todos nosotros tenemos hasta hoy derechos como refugiados. Ahora, supuestamente, nuestros derechos serán negociados en las etapas finales. Pero después de tres años seremos más débiles, no más fuertes.

¿Qué alternativa tenían los palestinos?

Eso es lo que pregunta la gente. Es una manera incorrecta de formular la pregunta. La manera correcta es preguntar por qué la OLP rechazó tantas propuestas de paz. En 1978 o 1979 el secretario de Estado norteamericano, Cyrus Vance, me pidió que fuera a Beirut y que les hiciera un ofrecimiento a los palestinos, al propio Arafat. Él lo rachazó. La pregunta correcta es por qué rechazaron tantas otras alternativas para terminar aceptando ésta. No tengo respuesta porque ésta es la peor alternativa, la más débil.

¿Usted dijo que esta OLP ya no representa a los palestinos?

Yo me refería al liderazgo de la OLP. En todos los movimientos, en todos los gobiernos, si los dirigentes hacen las cosas bien la gente los acepta, y si no hacen las cosas bien, la gente dice "Que se vayan". Nosotros nunca tuvimos elecciones. Nadie eligió a Arafat. En todos estos años yo lo apoyé porque se trata de un movimiento de liberación y estos movimientos no tienen elecciones. Pero ahora que hizo un acuerdo con los israelíes para convertirse en su socio yo no tengo el derecho de rechazarlo.
Y eso es lo que hacen muchos palestinos. Él se dirigió al Consejo Ejecutivo y obtuvo ocho votos. ¿Sabe cuánta gente hay en el Comité Ejecutivo? Dieciocho. De modo que ni siquiera tiene la aprobación del Comité Ejecutivo. Lo que hizo fue tomar una decisión personal porque cuenta con el apoyo de los norteamericanos, de los israelíes y de los egipcios. Pero no de su pueblo.

¿Cómo se sienten los palestinos frente a este acuerdo?

Depende de a quién le pregunte. Creo que todos están muy confundidos. En Cisjordania (Margen Occidental) y Gaza, muchos dicen: "Tal vez los israelíes ahora nos dejen un poco tranquilos". Otros dicen que recibirán mucho dinero. Usted sabe, hay mucha pobreza, mucho desempleo. Tal vez el acuerdo nos aporte algo de dinero. Pero muchos palestinos, incluyendo la gente de Gaza, están preocupados por el futuro.
Se dan cuenta de lo que hizo Arafat. No la OLP. Arafat. Él no representa a todo el movimiento. Desde la Guerra del Golfo, se volvió muy autocrático. Nadie sabe dónde está el dinero. Sólo él puede firmar los cheques. De modo que hay muchas críticas. La pregunta que debemos formularnos ahora es ¿qué harán los sirios? Siria es muy importante.

¿Y los jordanos?

Son los dos países importantes para nosotros. Los jordanos no se sienten molestos porque piensan que los palestinos tomaron decisiones por su cuenta, siendo que, como le dije, alrededor de 1.700.000 palestinos viven en Jordania. De modo que tendría que haber existido una coordinación. Y ahora los jordanos les están complicando las cosas a los palestinos. Así es que debe negociarse un acuerdo entre la OLP y Jordania.
Los sirios, por su parte, piensan en términos de estrategia. Y ven que toda la región estará dominada por Israel. Es la superpotencia de la zona. Los israelíes les piden a los sirios muchas cosas a través de los Estados Unidos. No sólo un tratado de paz. Quieren la desmilitarización. No quieren tropas entre las Alturas del Golan y Damasco. Quieren que cambie el rol de la policía secreta en Siria. Quieren que cambie el régimen. En otras palabras, el precio que tiene que pagarle Siria a Israel para tener una parte de las Alturas del Golan es muy alto. Los sirios están en una posición difícil.

¿Desaparecerá la violencia?

Por supuesto que no. La violencia continuará siempre y cuando haya ocupación militar. La causa de la violencia son los israelíes. Ellos tienen un ejército. En un principio, controlaban Cisjordania (Margen Occidental) con 20.000 o 30.000 soldados. Ahora tienen 150.000 soldados en la zona. Mientras estén allí, habrá violencia. Porque la ocupación es una forma de violencia. En segundo lugar, habrá violencia palestina -los palestinos entre sí y contra los israelíes-. Hay una causa constante de fricción y violencia. Lo mismo sucede en el sur del Líbano.

¿La OLP puede llegar a dividirse?

Tal vez. Hoy hay mucha discusión. Cuando le preguntan a Arafat cuál es su experiencia de gobierno, él dice: "Goberné Beirut durante veinte años". Miren lo que sucedió en el Líbano. Está destruido, en parte por los palestinos. Él no sabe porque nunca vivió en una sociedad, nunca estuvo entre su propia gente, en su propia tierra. Ahora, si los israelíes se lo permiten, si va a Jericó o a Gaza estará por primera vez con los palestinos en Palestina. No en Jordania, no en el Líbano, sino en Palestina. Tendrá exigencias diferentes y no estoy seguro de cómo va a funcionar.

NO PERMITIRÁN UN ESTADO PALESTINO

Los críticos imaginan futuros escenarios: a) Un Estado palestino subordinado a Israel, b) Una suerte de Estado confederado entre Palestina y Jordania. ¿Usted qué ve más probable?

Yo creo que los israelíes y los norteamericanos nunca permitirán un Estado palestino. No lo quieren. Una cosa es que los palestinos luchen por él, pero los israelíes no cederán. En otras palabras, la única manera de obtener un Estado es expulsando a los israelíes. No hay otra alternativa. Históricamente a menos que se expulse a la ocupación, no se puede tener un Estado. Y esa es la peor parte de este acuerdo: nosotros firmamos diciendo que ellos se pueden quedar. Lo que hemos aceptado es equivalente a la situación de Sudáfrica. Sin soberanía, sin poder estatal. Todo estará bajo el control de los israelíes.

¿Piensa que semejante escenario durará sólo unos años?

Espero que sí. Nunca va a terminar porque los israelíes así lo decidan. La única manera de que termine es por una fuerte presión palestina.

¿La confederación con Jordania no es viable?

Por ahora, es un signo de interrogación. Los jordanos están enojados porque la OLP negoció un acuerdo de principios con Israel y no con ellos. Técnicamente, no es posible. En el parlamento palestino votamos a favor de tener una confederación con Jordania, pero los jordanos se preguntan cómo van a tener una confederación con un Estado que está controlado por Israel. Así que, por el momento, es un signo de pregunta.

La mayoría de los argentinos no sabe mucho sobre los palestinos. ¿Puede describirlos?

Somos un pueblo que habitamos la tierra de Palestina históricamente durante 1.500 años. Árabes, cristianos y musulmanes. La mayoria de los palestinos son musulmanes. Yo, por ejemplo, provengo de una minoría cristiana que representa entre el diez y el quince por ciento de los palestinos. Formamos parte del Imperio Otomano hasta 1917. Las principales ciudades -Haifa, Jerusalén, Jericó, parte de Gaza- fueron construidas por árabes palestinos hasta principios de siglo, cuando comenzaron a colonizarlos con la ayuda europea, británica.
Lo que nos sucedió en 1917 fue que el gobierno británico dictaminó que los judíos podían establecer un territorio patrio allí y comenzaran a implantar colonias, hasta 1948, cuando estalló una guerra entre nosotros. Ellos estan mucho mejor armados. Los palestinos, esencialmente, son un pueblo rural que tiene pequeñas ciudades. De modo que perdimos la guerra en el '48 y nuestra sociedad quedó destruida.
En 1948, aproximadamente las dos terceras partes de la población palestina fue expulsada por los israelíes. Unos 780.000 palestinos, que ahora son tres millones. Hoy tenemos unos 800.000 palestinos que son ciudadanos israelíes. En 1967, el gobierno judío ocupó el resto de Palestina. Mientras tanto, nos mantuvimos vivos como pueblo, en la diáspora y en nuestro territorio.
Nos consideramos una nación, tenemos una literatura, una herencia nacional. Estamos conectados al mundo árabe, pero somos diferentes al resto de los árabes. Tenemos una tradición de lucha, única en el mundo árabe, para la autodeterminación. Tenemos nuestros propios líderes y nuestro discurso. La mayoría de los palestinos siente que llegará el momento en que tengamos nuestra nación. Pero el problema es que ahora resulta imposible.

(Extractos de "Pensar el mundo" de Jorge Halperín-Editorial Planeta Argentina SAIC-Buenos Aires 1997).

No hay comentarios: